El cáncer sigue constituyendo una de las principales causas de morbimortalidad del mundo con aproximadamente 18,1 millones de casos nuevos en el mundo en el año 2018 (últimos datos disponibles a nivel mundial estimados dentro del proyecto GLOBLOCAN).
Las estimaciones poblacionales indican que el número de casos nuevos aumentará en las dos próximas décadas hasta 29,5 millones al año en 2040.
También en España el cáncer es una de las principales causas de morbimortalidad. El número de cánceres diagnosticados en España en el año 2020 se estima que alcanzará los 277.394 casos según los cálculos de REDECAN, un número muy similar al del año 2019.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) asegura que muchas de esas muertes se pueden evitar. Según sus datos, entre el 30 y el 50% de los cánceres se pueden prevenir con hábitos saludables
Según la Organización Mundial de la Salud, se calcula que el total del gasto en cáncer en 2010 fue de 1,16 billones dólares (unos 962.000 millones de euros). Estas son las cifras oficiales. El gasto invisible de los pacientes de cáncer –con 14 millones de nuevos casos en el mundo en 2012 y una previsión de aumento del 70% en las próximas dos décadas.
Con estos datos ¿qué podemos hacer?
Los que nos dedicamos a la inteligencia artificial, la big data, blockchain, etc…..
¿Qué se espera de estas tecnologías?
Se espera que trabajaremos codo con codo con facultativos porque ellos nos avalan científicamente, con los pacientes porque ellos son nuestra prioridad y sensibilidad, con las instituciones para ahorrarles costes optimizando la toma de decisiones y con las sociedades médicas, que son garantes y auditores de nuestro trabajo verificando que los datos estén sanos, nuestra reglas certificadas y que nuestro sistema de aprendizaje esté siempre supervisado por entrenadores expertos. Todo esto ofrece al conjunto de la sociedad seguridad permanente, confianza en la tecnología, protección de la información suministrada, y respeto a la privacidad de los sujetos.
Nosotros desde CIBEX.BLUE entendemos que el conocimiento, si no se comparte, no sirve para nada, que la tecnología no debería tener la ultima palabra, que es una herramienta para ayudar a los profesionales y dar certeza y esperanza a los pacientes, que debe ser asumible por los sistemas públicos de salud, y que debe estar sometida a auditoria y certificación: la confiabilidad se sustenta sobre fuentes sanas y transparentes por lo que las mismas deben estar sujetas a inspección sin miedo a ser cuestionadas. Dudar es humano pero dar respuesta a las dudas, resolviéndolas, nos hace mejores, afianza el sentido de nuestras acciones y nos permite tener seguridad en esta nueva realidad.
Dpto. I+D+i